Actualmente muchos jóvenes experimentan con las drogas a edades tempranas, en una etapa de la vida en la que su organismo, especialmente el cerebro, está en pleno proceso de maduración. Por ello, padres y madres observan preocupados cómo sus hijos cambian de compañía, bajan su rendimiento, se sienten apáticos y también aumentan su agresividad. Pero, ¿a qué se debe todo esto? Desde el Instituto Noa, tu centro de desintoxicación especializado en el tratamiento de adicciones, vamos a intentar explicarte cómo se ve afectada la agresividad por el consumo de drogas.
Cambios en la agresividad por el consumo de drogas
Que las conductas violentas pueden ser causa o consecuencia del efecto de las drogas en el organismo es un hecho demostrado. El consumo de este tipo de sustancias genera una alteración en el funcionamiento de la corteza prefrontal, siendo ésta una parte del cerebro que desempeña un papel importante en la regulación del comportamiento y en la toma de decisiones y, como consecuencia, en la agresividad.
Estas son las drogas que más agresividad generan.
- Cocaína: esta sustancia origina alteraciones en los neurotransmisores y en los receptores, lo que tiene una grave repercusión en el funcionamiento cognitivo. Da lugar a la aparición de euforia, autoconfianza, egocentrismo y megalomanía. A la vez, pone al individuo en situación de tensión o alerta. Todo este estado anímico está relacionado con la aparición de comportamientos agresivos, siendo una de las drogas que generan más agresividad.
- Drogas de síntesis: drogas como el éxtasis, el LSD o las metanfetaminas producen un descenso en la capacidad para enfrentar responsabilidades y obligaciones laborales o familiares. No solo eso, sino que también predisponen al consumidor a comportarse de forma violenta.
- Alcohol: además, el alcohol es otras de las sustancias que más agresividad genera. Éste produce una alteración en las funciones de planificación, de autocontrol, de la toma de decisiones o de la inhibición de la impulsividad. Como consecuencia, se pierden las capacidades de juicio y se da un descontrol de las emociones, lo que provoca conductas agresivas y violentas hacia otras personas, e incluso hacia uno mismo.
La importancia de trabajar con profesionales para tratar los cambios de conducta por una adicción
Como hemos visto, el consumo de drogas da lugar a cambios en el comportamiento y a conductas negativas como puede ser la agresividad. Cuando esto sucede y la persona sufre una adicción, la mejor opción es ponerse en manos de profesionales que hagan posible la recuperación.
En el Instituto Noa estamos especializados en el tratamiento y rehabilitación de personas con trastornos relacionados con el consumo de cocaína, cannabis, heroína, fármacos, alcohol y otras sustancias nocivas. Además, no solo llevamos a cabo el método más eficaz, sino que nuestros tratamientos incluyen otras actividades cuyo propósito son la reducción de ansiedad, el control del impulso y la mejora de las habilidades personales y sociales del paciente.
¿Quieres tratar la agresividad por el consumo de drogas, salir de esta adicción y volver a tu vida de antes? En el Instituto Noa te ayudamos a conseguirlo. Contacta con nosotros si quieres más información sobre nuestro método o nuestro centro de ingreso. Acude a una primera consulta médica totalmente gratuita y déjanos ayudarte.